LAS HUELLAS FÍSICAS DE JOSELITO

La última sesión del ciclo de conferencias de 2020 estuvo dedicada a los lugares que conservan recuerdo de “Las huellas físicas de Joselito”.

Javier Bollaín, socio de Los de José y Juan, presentó a los participantes, recordando la presencia de los Bollaín en la Peña desde su fundación, con un especial recuerdo a su abuelo Adolfo, fundador junto a su hermano Pepe, a su padre, quien fue presidente y a su tía Nena, quienes han reunido su gran afición a los toros y su devoción por la Peña. Además comentó una curiosa historia de la camilla donde murió Joselito en Talavera.

Joel Bartolotti, notario francés, exdirector de la torista revista TOROS  de Nîmes, decana de la prensa taurina, recorrió los lugares donde toreó Gallito fuera de España. Portugal y Francia, en su etapa de becerrista y novillero. Perú donde protagonizó la temporada de 1920 y de donde volvería dos meses escasos antes de su muerte, y una curiosa corrida en Montevideo organizada por los aficionados locales, aprovechando el viaje de vuelta a España, e incluso un fallido contrato en Orán (Argelia).

Juan Salazar, socio de Los de José y Juan, hizo un ameno recuerdo de ocho sitios, que aún existen, por los que pasó Joselito en Madrid y otros sitios de España, al estilo de su interesante libro sobre lugares taurinos “Remembranzas imaginarias”. El Hotel Roma, la Grand Dumond, el restaurante Bilbaíno, la casa de la calle Arrieta, el Hotel Castilla de Toledo y la fotografía de la falsa calle Arrieta, fueron varios de los sitios que recorrió.

Manuel Fernández Leal, abogado sevillano, nieto del que fuera jefe de los Servicios Médicos de la plaza de toros de la Maestranza de Sevilla, en memoria de quien edita su blog “Leales del toreo”, nos trajo el recuerdo de sitios sevillanos relacionados con la vida de Gallito. La casa de la huerta de Gelves y la estatua de Gallito levantada allí en los años 50 a iniciativa de Luis Bollaín, la Alameda de Hércules, la Macarena y, como no, el vestigio de la Monumental de Sevilla pasaron por su recuerdo que finalizó con la copla “Silencio por un torero” de Quintero, León y Quiroga que acaba con la estrofa que dice: ¡Pá que quiero mi alegría/ si se ha muerto Joselito! Que fue un brillante remate de la conferencia y el Ciclo.

A continuación, el vídeo completo de la conferencia: